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La educación desde lo local a lo global

Fabio Pugliesi

Imaino que ha llegado el momento de pensar en un proceso de reconstrucción global para un nuevo orden económico, basado en la educación de las nuevas generaciones y la reeducación de los excluidos del processo economico para actuar en el proceso de construcción de nueva sociedade con justicia social.

Mi exposición se divide en tres partes. Inicialmente, hago una evaluación del optimismo tras la guerra fría y la difusión de las tecnologías de la información. Luego hago una evaluación del incumplimiento de estas expectativas y considero las especificidades de nuestro continente. Finalmente, presento el aporte de Paulo Freire para ser utilizado en este contexto y la experiencia de la conversación en videollamadas.

La periodista Anne Appleblaum en el best seller “Crepúsculo de la democracia” narra su convivencia con personas que estaban en una fiesta el 31/12/1999 en su casa recién reformada en el campo de Polonia.

El ambiente era de optimismo, después de toda la década en la que se había derrumbado la Unión Soviética y Francis Fukuyama consideraba que se vivía el “fin de la historia”.

En las décadas posteriores la expansión de los teléfonos inteligentes, la generación exponencial de datos, sus posibilidades de procesamiento y uso, así como las redes sociales han permitido relaciones sociales inusuales y la satisfacción inmediata de necesidades, deseos y caprichos.

Sin embargo, en la Biblia es recurrente la imagen de la embriaguez con vino para aludir que el exceso quita la virtud, el término medio, y quita la capacidad de deliberación, la libertad de elección.

De ahí la necesidad histórica de aprender a convivir con estos datos, considerando también la tendencia de asociaciones mentales que pueden ser precipitadas y sin fundamento que consisten en el “sistema 1”, según el premio Nobel Daniel Kahneman.

Además, los funcionarios de gobierno comunican sus decisiones, propuestas y entendimientos sin filtros institucionales como los partidos políticos y directamente en las redes sociales, lo que genera un proceso que no estaba previsto en el momento del surgimiento de las instituciones políticas existentes.

En fin, sin embargo, volvamos a nuestra América.

En las primeras páginas de su libro El Siglo de las Luces, Alejo Carpentier, al describir el Mar Caribe, destaca que las formas de vida existentes en él confunden incluso los reinos animal, vegetal y mineral para explicar la peculiar llegada de la guillotina después de la derrota de las guillotinas jacobinos en Francia.

Incluso me parece que, en el proceso histórico de las Américas, las imágenes de autores del realismo mágico o fantástico demuestran que sus creaciones están mucho más cerca de la realidad que muchos de nuestros relatos históricos.

En cuanto a la desigualdad social brasileña, recuerdo una observación de San Juan Pablo II que, en términos generales, dice lo siguiente: “Yo puedo entender este tema del hambre incluso en otros lugares, excepto con ustedes en Brasil”. De hecho, entender el hambre en un país que tiene el potencial de tener tres cosechas al año y las posibilidades de pescar en un litoral de nueve mil kilómetros revela una injusticia social y de poder muy grande.

En su libro “Pedagogía del oprimido”, Paulo Freire demuestra que la primera tarea del educador en alfabetización es identificar las cosas más importantes para el alumno y seleccionar cincuenta palabras que correspondan a esas cosas. De ahí que escribiendo tales palabras, relacionándolas con cosas, el estudiante aprenderá con las palabras más importantes para él. En resumen, el método propone el respeto a la experiencia.

Los logros de las tecnologías de la información a principios del siglo XXI dejaron obsoletos muchos conocimientos técnicos y tecnológicos y llevaron a la extinción de oficios y formas de acción política. Todo eso ha generado mucha ansiedad y es necesaria la acción cultural de Paulo Freire de considerar lo concreto para buscar nuevas posibilidades de futuro.

La facilidad de comunicación, los viajes y el cambio de mercancias y servicios han provocado cambios demográficos repentinos.

La reducción de los ingresos propios o del estatus social en relación con los ingresos y el estatus de otras personas ha generado revueltas.

Dado el volumen de información existente, la vida se ha vuelto más compleja como consecuencia del calentamiento global y la aparición de nuevos actores sociales basados ​​en cuestiones de género y cambios en las formas de comunicar. La gente empezó a tener más prisa, bajada de ingresos y urgencia.

En este contexto, es difícil educar para la democracia representativa si, presionando el ícono de un teléfono inteligente, es posible conocer la decisión de lanzar el programa social, pero puede ser difícil aprobar los criterios para la distribución de recursos para este programa.

Volviendo al libro de Anne Aplebaum, los militantes del partido comenzaron a polarizar la acción política a lo largo del siglo XXI, hasta ahora en Polonia, Gran Bretaña, Estados Unidos y, como demuestra la experiencia, en muchos otros países y la guerra de Ucrania refleja este proceso.

Esto está lejos de ser una fatalidad, ya que es posible la comunicación global y la superación de las distancias para el intercambio de ideas.

Todos los jueves, la “Conversación de lo local a lo global” de la Cátedra Waldo García Villarroel, promovida por la Fundação Iberoamericana CIAPE, utiliza una clase inversa en la que un expositor hace una presentación y cada participante hace discursos de dos minutos. Posteriormente, el expositor invitado, que está invitado a participar permanentemente en el Conversatorio, responde las preguntas y comentarios en bloque. Todo está organizado para que cada observación o pregunta dure dos minutos y dos horas al máximo de duración del Conversatorio.

De esta manera, busca imaginar y formar una acción cultural global, respetando las peculiaridades locales y asumiendo que la implementación de la justicia social necesita imaginación, considerando que los intentos anteriores están superados.



Por jpenafiel

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